Con sentidos mensajes de parte de sus amigos de navegación de Montevideo (Uruguay), de su barrio con quienes compartió fulbito y junto al nicho donde descansa su hermano, fueron sepultados los restos del marino mercante, José Maicol Ancajima Inga (24), en medio del clamor de la población del asentamiento 3 de Abril, para ubicar a los responsables de su muerte.
En medio del llanto, Eufemia Inga Juárez, frente al ataúd de su hijo, le pidió fuerzas para soportar el inmenso dolor. “Ahora ya estás junto a tu hermano. Me dijiste que te esperara para ir a Chulucanas y ahora ya estás dormido”, le dijo. Al mediodía, los restos de la víctima salieron de su vivienda en la calle 03 del asentamiento 03 de Abril, acompañados por cientos de vecinos.
Se despide
La madre de la víctima aseguró que su enamorada llegó hasta su vivienda para despedirse, prometiendo estar en el sepelio, sin embargo, no llegó. Asimismo, dijo que la enamorada de su hijo reafirma la versión del robo, sin embargo, aseguró que hay partes que no son creíbles y por ello pidió que se aceleren las investigaciones.
Era la esperanza
Vecinos de José Maicol, destacaron su inquietud de irse a trabajar muy lejos para darle lo mejor a su madre, quien fue padre y madre para él y sus hermanos.
“Era la esperanza que tenía en ese hijo, pero el día de hoy toca sepultarlo por culpa de unos forajidos”, dijo un vecino en agradecimiento a la familia.
Asimismo informó la familia que viajará en los próximos días a Ventanilla, para reclamar las pertenencias de José Maicol, como son: su billetera y celular. De paso seguirían de cerca los avances de la investigación en torno al crimen del joven marino.
