Editorial: ¿Le creemos?

Sabemos que el Proyecto del Alto Piura siempre ha sido el caballito electoral de los políticos y aspirantes al sillón presidencial y regional. No hay candidato que no haya prometido de todo con tal de ganarse la preferencia del votante, y la cosa no cambia mucho cuando se trata de autoridades, y más cuando se trata de personajes como los que hoy en día nos gobiernan, a quienes no les cuesta nada prometer millones y a la hora de la hora se hacen los locos. Así ha pasado con las obras de prevención, muchas de las cuales aún no tienen asignado ningún presupuesto, pero verbalmente ya prometieron, asignaron, transfirieron y hasta ejecutaron el gasto de inversión.

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“Sobre todo porque sabemos bien que su popularidad está de caída y utilizar este tipo de promesas no les cae nada mal...”.

Ayer, Alberto Otárola volvió a ratificar un compromiso, que Doña Dina Boluarte asumió y manifestó en el Cade 2023, de asignar el presupuesto necesario al Proyecto Alto Piura el 2024; sin embargo, mientras que no esté firmado y sellado difícilmente se podrá creer. Sobre todo porque sabemos bien que su popularidad está de caída y utilizar este tipo de promesas no les cae nada mal para subir un par de puntos en la próxima encuesta.

Sin embargo, mientras Otárola y Boluarte prometen de todo al Alto Piura, cuando se trata de la obra de Chutuque y su paralización, al menos al Premier, lo enmudece y hasta le incomoda. Y solo como un ejemplo de que ‘mecernos’ no les cuesta nada, cuando se trató de la mencionada obra, el primer ministro dijo que se iba a culminar de todas maneras en diciembre, cuando ya estamos más de quincena de noviembre y todavía tienen que volver a adjudicar la obra, a la cual le falta más del 70%. No pues señor Premier, no quiera tomarle el pelo de tontos a los piuranos.