El descaro de los parlamentarios no tiene límite, es como si no conocieran la vergüenza ni tuvieran un mínimo de empatía con los millones de peruanos que hoy en día pasan por la peor crisis económica de los últimos tiempos.

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Y es precisamente eso lo que indigna, que mientras en los mercados todos los días las amas de casa sufren porque el presupuesto diario no les alcanza con el alza de precios; y mientras, los peruanos ya no saben qué hacer porque el costo de la vida sube y los sueldos no, pues mas bien se reducen, ellos en diciembre del año pasado, aprobaron una adenda de S/ 2 millones-dinero que sale del bolsillo y de los sueldos de cada uno de los peruanos– para satisfacer los antojos de su paladar.

Solo para tener una idea, si antes a un parlamentario se le asignaba 15.93 soles para su almuerzo, ahora se le asignan 80 soles. Si antes se les daba 4.20 soles para un desayuno, ahora pueden gastar más de S/ 31. Es decir que, entre los 130 parlamentarios se pueden gastar un total de 25 mil soles por día. Y no contentos con eso, les parece que no hay nada de qué quejarse, tan es asi que el congresista de izquierda, Waldemar Cerrón, aseguró a la prensa que “el alimentarse no es un gasto innecesario , los congresistas también pagamos impuestos”. Mientras que Patricia Chirinos dijo que “todo peruano debe comer rico”.

Habría entonces que comparar estas cifras con los míseros 378 soles que el INEI da por sentado, es la canasta básica de un peruano a estas alturas, lo que hace un total de 12.6 para que el peruano de a pie, desayune, almuerce y cene. Mientras el otorongo debe comer alimentos de “altísima calidad”, tal y como lo estipula el contrato.

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