Esta epidemia del Covid 19 no tiene cuándo parar. Es más parece que ya se va a convertir en algo permanente, de lo cual solo tendremos que protegernos con las vacunas y los cuidados sanitarios que ya venimos practicando. Cada día surgen más variantes, el virus muta y surgen diversos casos que nos llenan de preocupación al no saber si la vacuna —ya aplicada a miles de adultos mayores— los protegerán.
Ahora la que nos está amenazando es la variante Delta, sobre la cual ayer el Ministro de Salud alertó del tercer caso en Arequipa -que no tiene nada que ver con los 2 anteriores en la misma región-, y un caso nuevo en Comas. Es decir la variante ya se está propagando y es sumamente necesario que las instituciones facultadas, Minsa, EsSalud, Colegios Médicos, de Enfermeras, etc, estén alertas de esta variante y con planes de contingencia listos por si acaso la situación se complique con la cantidad de casos que se presenten. Lo más preocupante de esta variante no es solo su transmisibilidad, altamente contagiosa; sino que según estudios en Reino Unido, existe una pequeña reducción de la efectividad de la vacuna Pfizer a esta variante, de un 93% a un 88%.
Quizás sea por ello, que desde ayer comenzaron a circular alguna notas que señalan que en Israel, adultos mayores que ya habían sido vacunados con la Pfizer, con sus dos dosis, han vuelto a contagiarse. A la fecha en el Perú hay en total 4 casos, los cuales afortunadamente son leves a moderados, estamos advertidos y estamos a tiempos de establecer los parámetros y cuidados necesarios para que esta variante no afecte de manera destructiva a nuestra región. La labor de protección no solo la implementan los centros de Salud o instituciones de este sector. Ellos implementan las políticas, dotan de la medicina y los equipos, pero nosotros somos quieres debemos cuidar nuestra vida.