Una luz de esperanza se vislumbró hace tres días cuando el Reino Unido se convirtió en el primer país en el mundo en iniciar una vacunación masiva contra la Covid-19. Una mujer de 90 años fue la primera en recibir la tan ansiada vacuna que podría liberar a todo el mundo de una pandemia que sigue cobrando miles de muertes. La noticia, como era de esperarse alegró no solo a los ciudadanos de Reino Unido, sino al mundo entero.
Sin embargo, si bien es cierto que la vacuna ya empezó a aplicarse en Europa; en el Perú aún no podemos saltar de alegría totalmente porque aún hay muchos inconvenientes que superar, más aún en un momento de crisis política, y a puertas de un proceso electoral que de todas maneras podría demorar la llegada de la vacuna y su posterior utilización para empezar a inmunizar a la población.
Según el presidente Sagasti, el primer lote de vacunas llegará a fin de mes (diciembre) “si todo sale bien”, ha dicho, pues es consciente que en este país, donde lamentablemente la burocracia y también la corrupción se confabulan, todo puede pasar y podría pasar meses para que llegue la vacuna.
Mientras tanto, lo más prudente y responsable es seguir cuidándonos, no bajar la guardia, pues la pandemia no se ha ido, y prueba de ello es el aumento de casos graves en los hospitales, sobre todo de jóvenes que en la errónea idea de que eran inmunes al virus, se han expuesto y ahora están clamando por una cama de UCI. La vacuna ya es una realidad, pero para no olvidemos que hasta que llegue al Perú, podría pasar de todo, así que por favor cuidémonos, y no nos expongamos innecesariamente.