Los casos de tocamientos y acosos a menores en las aulas siguen siendo una preocupación para las Ugel y para la Dirección Regional de Educación, pero sobre todo para los padres de familia que tienen que confiar a sus hijos a personas prácticamente extrañas, que si bien es cierto tienen la responsabilidad y han sido formados para educarse y orientar a los niños, nadie conoce la parte emocional y el interior del docente.
El caso del Mayor del Ejército Peruano, quien era jefe de Brigada en el colegio Pedro Ruiz Gallo y ahora está involucrado en un proceso investigatorio por tocamientos indebidos a una cadete de IV año, ha encendido las alarmas, pues esto evidencia que ni siquiera el nivel de formación de rigidez y rigurosidad de un colegio militar es garantía de que nuestros hijos no vayan a toparse con malos elementos que ocasionan traumas en los menores.
A la fecha existen 46 casos de tocamientos y acoso solo en los colegios que integran la Ugel Piura, es decir de Piura y distritos.
Entonces nos preguntamos qué esta pasando con nuestros maestros, qué sucede con el Magisterio que poco a poco ha ido manchando su imagen gracias a maestros abusivos, violadores o depravados.
Lamentable, pues el trabajo de los docentes, es de los más loables y destacados que existen en el mundo, y es precisamente porque tienen la labor de formar a nuestros niños, y porque trabajan con generaciones y promesas del mañana, es que no podemos permitir que se convierta en el enemigo dentro del aula.
Ojalá y se puedan mejorar los filtros a la hora de la contratación de los docentes y evaluarlo concienzudamente de tal manera que no nos sorprenda después.
