Inmediatamente que asumió la presidencia de la República, Dina Boluarte, no faltaron las voces de aquellos que lanzaron el pedido de un adelanto de las elecciones; sin embargo, desde el saque la primera presidente mujer en la historia del Perú, dejó claro que gobernará hasta el 2026.
Ayer lo volvió a enfatizar, señalando que “respeta las voces” que piden adelanto de elecciones, pero que “más adelante” se verán “alternativas” para “mejor reorientar los destinos del país”.
Es decir, habrá que darle la ‘tregua’ que ha solicitado y que lo prometido en su primer discurso al pueblo peruano, de “instaurar un gobierno de unidad nacional”, se cumplan, convocando a todas las fuerzas políticas. “Creo en su buena voluntad”, ha dicho también el arzobispo de Lima, Carlos Castillo, quien se reunió con ella horas después de asumir la presidencia de la República.
Así, el nuevo Gabinete que se espera sea designado pronto, tenga las cualidades morales y competencias profesionales para encaminar al país, y sacarlo del hoyo en el cual se encuentra tras 17 meses de una crisis política y económica provocada por el gobierno del vacado expresidente Pedro Castillo.
Necesitamos un Gabinete decente, que asegure la gobernabilidad y el crecimiento del país, que le devuelva la confianza a los inversionistas y se generen las fuentes de trabajo que tanto se necesitan; pero además atacar la corrupción y la inseguridad en el país. Eso es lo que el país exige de la presidente y del nuevo Gabinete.