La Municipalidad de Piura ya prepara otra ordenanza para ordenar el transporte, o por lo menos se encuentra en proceso. La expulsión de los buses interprovinciales, nacionales e internacionales de la ciudad aún no es una norma, pero en pocos días pasaría a Comisión de Transporte para ser debatida y se autorice su pase al Pleno.
Con ello, se pretende sacar de la vías de la ciudad a dos mil buses que actualmente circulan y saturan las principales avenidas de Piura, para que solo se limiten a transitar por las vías de Evitamiento.
Esta es solo una de las ordenanzas que la comuna pretende hacer cumplir. Sin embargo, nadie explica cómo pretenden controlar esa avalancha de vehículos interprovinciales y nacionales que a diario ingresan a la ciudad. Nadie explica con qué personal impondrán respeto en la Av. Loreto donde existen más de 10 terminales de embarque y desembarque, pese a que solo cuentan con licencia para compra y venta de pasajes. ¿Cómo señores funcionarios, si la misma comuna durante tantos años les ha permitido hacer lo que quieren?
Es decir, en estos momentos la Municipalidad de Piura no cuenta con personal para hacer cumplir sus normas y ni siquiera tiene el presupuesto para contratarlos. ¿No se supone que para aprobar las ordenanzas deberían evaluar también su viabilidad? Esta gestión ya va de salida y le dejará al nuevo alcalde la difícil tarea de implementarlas, pero esperemos que el nuevo alcalde y sus técnicos tengan una visión mucho más amplia del problema y no se limiten a amedrentar con normativas que en la práctica no tienen ni cómo viabilizar.