El Poder Judicial aceptó los nueve meses de prisión preventiva que solicitó el Ministerio Público para la imputada Magali Quispe Fernández.

En las próximas horas, la abogada Magali Jessenia Quispe Fernández (36), quien asesinó a su pareja, el militar José Santos Miranda Pulache (58), será recluida en el Penal de Mujeres de Sullana.

Ayer, el juez Manuel Francisco Fernández Reforme, aceptó la solicitud de nueve meses de prisión preventiva que había solicitado el Ministerio Público para la imputada.

De acuerdo con el Ministerio Público, Quispe Fernández acabó con la vida de su conviviente, José Santos Miranda Pulache (58), tras ocasionarle tres heridas en el cuello efectuadas con un vidrio, el pasado jueves en su vivienda de la urbanización Bello Horizonte.

La mujer, en un primer momento dijo que su pareja se había suicidado cuando se encontraba solo en su casa. Incluso, indicó que el occiso le dijo que ya estaba cansado de esta vida. Entonces ella decidió marcharse de su casa. Al siguiente día al retornar al inmueble encontró a su pareja sin vida.

Sin embargo, los agentes de la Sección de Homicidios de la División de Investigación Criminal (Divincri-Piura), al interrogar a Magali Miranda Pulache, ésta entró en ciertas contradicciones y aceptó haber asesinado sin ayuda de nadie a José Miranda.

La mujer para borrar ciertas evidencias, roció combustible y otros insumos en el cadáver. Aunque para la Policía, la investigada trató de quemar el cuerpo. Magali Quispe con colaboración de quien sería su pareja, César Ubaldo Quispe García, desapareció la ropa del occiso, la ropa de ella y el vidrio que utilizó para asesinar al militar.

Harold Romero, abogado de la familia de la víctima, manifestó que solicitarán al Ministerio Público que Jessica Yarlequé Cabrera, abogada de Magali Quispe, también sea incluida en el proceso.

Esto se debe a que existen comunicaciones telefónicas entre la abogada y César Quispe García (presunto amante de Magali), en las que le recomienda que compre ciertos insumos, como combustible y lejía, para eliminar ciertos indicios que puedan comprometer a la imputada en el crimen.

Las pretensiones de la defensa eran hacer creer que el militar José Miranda se había suicidado y así exculpar a Quispe Fernández de ser la asesina.

De otro lado, el abogado Harold Romero, indicó que el caso es muy complejo y que faltan diligencias por realizar.