Los pobladores del barrio Punta Arenas fueron testigos de una batalla campal, pero la proliferación de bares preocupa en el distrito.

Momentos de zozobra vivieron los pobladores del barrio Punta Arenas por una violenta gresca callejera protagonizada por dos bandos de parroquianos a las afueras de los bares ubicados a inmediaciones del camal municipal.

El violento hecho de sangre ocurrió aproximadamente a las 4:00 de la tarde.

En imágenes grabadas por los mismos vecinos se aprecia como un hombre quedó tendido a la mitad de la calle, y otro joven se movía a duras penas en medio de un charco de sangre. Este último había recibido sendos cortes con picos de botella.

Según indicaron los vecinos, lo ocurrido fue un enfrentamiento con picos de botella y ladrillazos por parte parroquianos a la salida de un bar de la zona.

Los moradores del lugar hicieron sentir su preocupación por este tipo de hechos que atentan contra su integridad y la de los vecinos.

Así, mediante sus redes sociales, exigieron al alcalde, Fernando Ipanaqué Mendoza, clausurar este tipo de locales. Los pobladores se quejaron, pues pese a las constantes llamadas telefónicas, el personal policial y de fiscalización municipal tardaron en llegar al lugar del enfrentamiento.

Los moradores señalan haber presentado memoriales para la clausura de estos locales que son reincidentes con hechos de alteración al orden público; sin embargo las autoridades no toman cartas en el asunto.

“El día que pase una desgracia recién van actuar y ellos serán los responsables”, indicó una vecina.