Mamá, mamá, por favor, da el dinero”, es el uno los audios de Whatsapp que envió la adolescente A. CH. M. (17) estudiante de Derecho y Ciencias Políticas, para hacerle creer a su madre que había sido secuestrada por una banda de hampones y así lograr obtener 5 mil soles.

Este mensaje que fue determinante para los agentes de la División de Investigación Criminal (Divincri) para descartar el secuestro.

“Analizamos el audio y nos percatamos que todo era fingido, no era secuestro. Porque hay un momento que los gritos de desesperación de la menor se cortan y luego vuelve a gritar”, declaró el coronel Enrique Goicochea Chunga, jefe de la Divincri-Piura..

Desesperación

Eran las 11:30 a.m. del martes y a la sede de la Divincri llegó M. M. C. (46) para denunciar que su hija de 17 años, había sido supuestamente secuestrada.

La angustiada madre de familia presentó unos mensajes de Whatsapp, en el cual le decían que pague 5 mil soles o de lo contrario su hija iba a morir. Para hacer creer que todo era real, recibió una foto de la menor maniatada, con un trapo en la boca y con los ojos vendados. Incluso, una navaja y sangre.

Sin embargo, todo había sido tramado por su hija en complicidad con dos amigos de 16 y 17 años, a quienes conoce cuando estudiaban en un conocido colegio preuniversitario.

Los agentes, en un trabajo de inteligencia en coordinación con los padres de la menor, simularon llegar a un acuerdo con los falsos secuestradores. Y pactaron encontrarse en el parque, Capitán FAP, Abelardo Quiñonez de la Urb. Miraflores, para pagar el dinero.

Posteriormente, al mencionado lugar llegó la menor de 16 para recibir el dinero, siendo retenida por los agentes policiales. La menor reconoció que todo era mentira.

Asimismo, se retuvo a la otra menor de 17 años, quien había instruido a la menor antes mencionada para que recoja el dinero.

Una de las madres de estas últimas menores, indicó que fue A. CH. M. (17), quien planificó su autosecuestro. Y que bajo amenazas de contar algunos secretos personales que sus amigas le habían confiado, las convenció para que sean sus cómplices.

De otro lado, fuentes de la Divincri informaron que la menor al verse descubierta, regresó a su domicilio, donde fue retenida.

El abogado, Salvatore Hurtado, dijo que por esta falta cometida por las menores, el Juzgado de Familia podría determinar para ellas medidas socioeducativas.