La innovadora bolsa confeccionada a base de yuca logra disolverse en agua y es comestible.
En Indonesia, la empresa Avani Eco ha creado una bolsa de “plástico” ecológica y biodegradable que se disuelve en agua en cuestión de segundos e incluso puede comerse.
Esta sorprendente innovación está confeccionada a base de yuca, un alimento básico en muchos países de África, América Latina y Asia. De cuyo procesado se ha confeccionado bolsas que se sienten como plástico, pero completamente degradables y compostables.
“Nuestro país se está ahogando en plástico”, refiere Kevin Kumala, director de ecología de la empresa con sede en Bali. Debido al insumo natural con el que está confeccionada, estas bolsas son tan seguras que si los animales se la comen, no les causará ningún daño.
Cifras alarmantes
Al menos 8 millones de toneladas de plástico son arrojadas al océano cada año. Esto es el equivalente a arrojar el contenido completo de un camión de basura al océano por minuto.
Solo el 14 % de los envases de plástico se recupera para reciclaje, mientras que la gran mayoría se usa una sola vez. Además, el 95 % del valor del material de los envases de plástico, que está entre 80 mil millones y 120 mil millones de dólares anuales, se pierde para la economía.
Este plástico que termina en el océano genera daños irreparables a las especies que lo habitan. La vida marina y las aves mueren por comerlo o enredarse en el plástico.