Los restos óseos del pequeño Émile Soleil, un niño de dos años y medio cuya desaparición mantuvo en vilo a Francia desde el pasado mes de julio, han sido descubiertos, según ha confirmado este domingo la Fiscalía gala.
El hallazgo tuvo lugar el sábado en las cercanías de la aldea donde se perdió su rastro, Haut-Vernet, ubicada en el departamento de Alpes-de-Haute-Provence, al sureste del país. Un análisis de ADN realizado este domingo confirmó que los huesos pertenecen al niño Émile Soleil, según informó la Fiscalía de Aix-en-Provence, citada por la cadena pública ‘FranceInfo’.
En los próximos días, la Gendarmería francesa llevará a cabo investigaciones adicionales en el lugar del hallazgo y analizará los restos del niño para intentar esclarecer las circunstancias de su fallecimiento.
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Émile desapareció de la residencia de su familia en julio sin dejar rastro alguno. En un principio, los investigadores solo disponían del testimonio de dos vecinos que afirmaron haber visto al niño saliendo de su hogar y caminando solo por una calle descendente a lo lejos. Aunque ninguna hipótesis fue descartada, desde el inicio las autoridades señalaron que sería complicado encontrarlo con vida en caso de que se tratara de una desaparición voluntaria, especialmente después de los primeros días.
