Después de 18 horas de incertidumbre y angustia, los familiares de ocho pescadores recibieron la mejor noticia: todos fueron rescatados con vida tras naufragar la madrugada del viernes. Entre lágrimas y abrazos, agradecieron a Dios por lo que consideran un verdadero milagro.

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El naufragio

La embarcación «Mi Blanquita» partió de Paita el jueves al mediodía con destino a Chimbote, motivados por los reportes de una buena temporada de pesca en la zona. Sin embargo, lo que prometía ser un viaje corto cambió drásticamente cuando, alrededor de las 3:00 a. m. del viernes, la embarcación sufrió un percance y terminó naufragando cerca de Bayóvar, en la provincia de Sechura.

La esposa del patrón de la lancha, Esther Huamán Delgado, recibió una llamada desesperada de un tripulante:
«Hemos naufragado, por favor avisa al dueño del bote, estamos por la coordenada 5488509».

Esas fueron las últimas palabras que escuchó antes de que la comunicación se cortara. El miedo la invadió, sabiendo que en la embarcación no solo estaba su esposo, Eli Pérez, sino también su hijo, Junior Pérez.

Esperanza y milagro

Desde ese momento, el miedo y la desesperación se apoderaron de los familiares, quienes viajaron rápidamente a Sechura para informar sobre el naufragio a la Capitanía de Parachique.

Las horas transcurrían sin noticias hasta que, cerca de las 9:00 p. m. del viernes, recibieron una llamada que lo cambió todo:
«Los hemos visto en Punta Arena, son ocho pescadores y están vivos, están a salvo».

El alivio y la alegría fueron incontenibles. Entre abrazos y lágrimas, los familiares en Parachique celebraron la noticia, aún más cuando pudieron hablar directamente con los pescadores y confirmar que todos estaban sanos y salvos.

Rescate en Punta Arena

Tras el naufragio entre Punta Chode y Bayóvar, los pescadores fueron encontrados en Punta Arena, cerca del límite con Lambayeque.

Las autoridades de Parachique y el equipo de vigilancia del Sernanp en la Reserva Nacional de Illescas brindaron asistencia y los trasladaron a Chiclayo.

El rescate de los ocho pescadores paiteños es considerado un milagro, pues lograron sobrevivir al naufragio y ser rescatados con vida.