Más muertes en la región. Muchas interrogantes y dos jóvenes acribillados de catorce balazos es lo que ha dejado el ataque de una banda de sicarios en el distrito de Castilla.

Eran las 10:30 a.m. de ayer y los vecinos de los asentamientos 4 de Mayo e Independencia escucharon una ráfaga de balas, gritos de auxilio y el sonido de dos motocicletas fugando a toda velocidad.

La curiosidad se apoderó en la zona y los moradores acudieron hasta una parte de la ribera del río Piura, donde encontraron a dos personas tiradas en un charco de sangre.

Rápidamente, el delictivo hecho se corrió por todo el vecindario y se dio aviso a los agentes de la Comisaría de Castilla, quienes acudieron después de media hora.

La Policía retiró a los pobladores, para que no interrumpan las pericias que se iban a realizar ante la llegada del fiscal de turno, quien demoró cuatro horas en asistir a la escena del crimen.

Cruel ataque

Según versiones de algunos testigos, los jóvenes habrían sido perseguidos por sus asesinos. Incluso uno de ellos, en su intento por salvar su vida, quiso trepar una pared construida por calaminas, pero terminó siendo rematado a balazos.
Mientras que su compañero fue atacado de frente y acabó con el cráneo destrozado.

El feroz asesinato, también pudo alcanzar a una menor de quince años, quien se encontraba en su vivienda y fue rozada por una bala en el pecho.

Los identifican

Pasaban los minutos y no se hizo esperar la llegada de los familiares, quienes protagonizaron dramáticas escenas de dolor al ver a sus seres queridos tirados sobre la tierra.

Es así, que se identificó a las víctimas como Olin Fernando Gonzáles Urdiales (21), quien tenía seis orificios de bala, tres en la espalda, uno en el tórax y dos en el cráneo.

Mientras que, Gerado Navarro Prado (22), recibió ocho impactos de bala, cinco de ellos en la espalda, uno en el cráneo y dos en la parte del estómago.

La madre del último occiso, Roxana Prado Chanduví, contó a LA HORA que su hijo no habría recibido amenazas y mucho menos tenía problemas, sin embargo, no se explica porqué terminó asesinado.

Mientras, que el padre de Olin Gonzáles, prefirió guardar silencio y pidió que respeten su dolor y el de su familia.

Varias hipótesis

Según indican las investigaciones de la Policía, los acribillados habrían llegado con sus asesinos hasta el mencionado lugar y se originó una discusión que terminó en desgracia.

Otra hipótesis es que los fallecidos conocidos por sus amigos como ‘buitre’ y ‘Chavo’, fueron seguidos por cuatro sujetos a bordo de dos motocicletas, quienes eran de nacionalidad extranjera y acabaron con sus vidas.

El caso se maneja con total reserva para dar con el paradero de los criminales, quienes han provocado miedo en la población y han dejado al descubierto que en Piura si existe el sicariato.