Más de 3 mil pobladores del caserío Tunape, en el corazón del Bajo Piura, viven un martirio por el agua potable. Desde hace 15 días no reciben agua ni en cisterna.

Y lo peor de todo es que se invirtieron recursos municipales. En el 2024, por parte de la Municipalidad Distrital de La Unión, se ejecutó un servicio de cambio de redes de agua potable. Con la esperanza de que el agua llegará con más presión, vecinos ayudaron en faenas comunales a cambiar dichas redes; sin embargo, el servicio no mejoró.

Desde aquella fecha, los vecinos han tenido que cavar huecos en el frontis de su domicilio para obtener agua; sin embargo, la realidad sigue siendo la misma e incluso ha empeorado.

La madre de familia Veronica Yovera reveló que desde la Municipalidad les programaron un abastecimiento único para ellos. Todos los domingos de 8 de la mañana hasta las 12; sin embargo, siguen padeciendo por el agua potable. Reveló que son 12 domicilios que reciben agua con una débil presión, incluso recolectando agua desde unos agujeros.

La madre dijo que esta urgencia por el agua potable se le ha trasladado al alcalde Ruperto Fernández Sernaqué y a sus funcionarios y solo les dicen que “tengan paciencia”. Sin embargo, la necesidad por el agua espera. Lamentaron que mañana sus hijos tengan que retornar a clases en dichas condiciones.

“Lamentablemente, no hacen caso a nuestra presión. Estamos condenados a vivir sin agua potable desde hace muchos años. “Muchas autoridades nos han prometido agua y alcantarillado, pero seguimos olvidados como siempre”, declaró indignada.

Hay que indicar que actualmente la Municipalidad Distrital de La Unión solo cuenta con dos fuentes de agua para abastecer a más de 40 mil habitantes; son el pozo San Carlos y el Miragarzón, que forma parte del proyecto de agua y alcantarillado de Los Tablazos.

En el 2024, el Gobierno Regional de Piura de Luis Neyra León perforó un pozo de reemplazo en la zona San Carlos que fracasó y miles de soles fueron invertidos en vano.