Baño de sangre. Dos airados hermanos no tuvieron piedad de un hombre, de 91 años, a quien lo asesinaron a punta de patadas y puñetazos frente a su esposa.
El feroz ataque de los sujetos, quienes se encontraban en estado de ebriedad, ocurrió a las 6:45 p.m. del último miércoles, cuando la víctima estaba a pocos metros de su vivienda ubicada en el sector Portachuelo de Culucán, Comunidad Campesina de Pingolas.
TERRIBLE DRAMA
La pareja de la víctima, Susana Parrilla Landacay (73), contó que ella y su esposo Alejandro Tocto Saavedra (91) regresaban de laborar en su parcela.
Sin embargo, fueron interceptados por los individuos, quienes insultaron y empujaron al anciano, quien cayó al suelo. Los facinerosos sin razón alguna se ensañaron con el nonagenario, quien llegó a expulsar sangre por la boca y rostro.
Tras este hecho, la mujer pedía a gritos que dejen a su pareja, pero los atacantes no entendían razones y masacraron a su víctima.
LA AUXILIAN
La afectada solicitó ayuda a la teniente gobernadora del sector, Élida Jiménez Troncos, quien denunció el hecho ante la Comisaría de Ayabaca. Es así, que ocho agentes y cuatro ronderos salieron tras los presuntos asesinos, quienes fueron identificados como los hermanos Carlos Avelino (26) y Reynaldo Abad Saguma (39).
Según indicó la Policía, el móvil de este crimen habría sido un robo, mientras que la teniente gobernadora descartó esta posibilidad, aduciendo que los ancianos no llevaban consigo objetos de valor.
JUSTICIA RONDERIL
Enterados del caso, más de ochenta ronderos llegaron a la dependencia policial de Ayabaca, para sacar a los detenidos y hacer justicia con sus propias manos. Pero esto fue obstruido por el comisario, José Chinchay, quien aseguró que se aplicará todo el peso de la ley.