Sicarios fuertemente armados ingresaron ayer por la tarde a un restaurante de Paita y desataron una balacera contra cuatro personas.

De acuerdo a las versiones de los testigos, los sujetos fueron directamente al parecer al segundo piso del local ubicado en el asentamiento humano Miguel Grau para quitarle la vida a los cuatro amigos que estaban reunidos en una mesa.

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Se asegura que fueron hasta 10 disparos los que percutaron en el local, perdiendo la vida en el acto el joven padre de familia Andy Jander Miñán Farfán de 28 años de edad, quien era hijo único, habría recibido dos balazos en la cabeza.

Asimismo, en medio de un charco de sangre quedaron heridos de gravedad Luis Alberto Navarro Fernández y Clever Salazar Bayona, uno de ellos con dos disparos en el pecho.

Ambos heridos fueron trasladados de emergencia por efectivos de la Comisaría de la ciudad roja del pescador, hacia el hospital Las Mercedes. El estado de ambos heridos es de pronóstico reservado.

INTENTÓ SALVARSE

Mientras tanto, en medio de la balacera intentó huir Kevin Anthony Rossel Paredes, de 21 años de edad, quien salió raudo en su moto, pero fue perseguido por los asesinos. La víctima llegó hasta el Pueblo Joven San Martín Occidente, donde cayó al pavimento impactado por tres balazos y en medio de un charco de sangre.

DEJAN ARMAS

Cabe mencionar que en el asiento de una mototaxi, en la cual al parecer huían los sicarios, fueron hallados dos revólveres que habrían sido utilizados por los delincuentes para acabar con sus víctimas.
Trascendió que el móvil sería la guerra de bandas rivales por los cupos en las obras de construcción civil, que se ejecutan en el puerto de Paita.

CONSTERNADOS

Familiares y amigos de las víctimas están consternados por lo ocurrido.

“Andy Miñán Farfán, hijo de mi corazón cómo te fue a pasar esto. Cuánto nos duele tu pronta partida a manos de estos maleantes. Que el Señor te reciba en sus brazos. Te amamos por siempre. Que el Señor le dé consuelo a tu querida mamá y papá. Te amo hijo.”, expresaron en redes sociales sus familiares.

Asimismo, se conoció que hay moradores que piden mayor seguridad en la zona donde se ubica el local donde fue la balacera.

También piden mayor fiscalización por parte de la comuna provincial a los establecimiento de venta de licor que atienden fuera del horario extablecido.