El Valle de San Lorenzo, en la región Piura, enfrenta una grave crisis hídrica que ha puesto en peligro los cultivos y la vida de los agricultores de la zona. La tragedia tocó a una familia del agro el pasado fin de semana, cuando Alcides López Bustamante, un agricultor de 40 años, murió de un paro cardíaco tras presenciar el deterioro de sus cultivos. El fallecimiento de López Bustamante, conocido como «el curita» en su comunidad, se ha convertido en la primera víctima mortal asociada directamente con la escasez de agua en la región.
Fallece agricultor tras ver sus cultivos secarse
Alcides López, natural del caserío CP6 – Partidor, en el distrito de Las Lomas, no pudo resistir la angustia de ver sus sembríos de arroz, mango y limón sucumbir a la falta de agua. El agricultor, que había invertido todos sus recursos y esfuerzos en su tierra, observó cómo sus cultivos se secaban a causa del déficit hídrico, lo que le provocó un colapso emocional que derivó en su fatal paro cardíaco. Su muerte ha dejado un vacío profundo en la comunidad agrícola del Valle de San Lorenzo, donde era muy querido y respetado.
El presidente de la Asociación de Productores de Arroz del Valle de San Lorenzo, #PortillaGuarnizo, expresó su consternación ante la tragedia y destacó que la pérdida de López Bustamante es un duro golpe para el agro de la zona. «El ‘curita’ era un hombre comprometido con el campo, su partida deja un gran vacío entre los agricultores de San Lorenzo. Su muerte es la más dolorosa consecuencia de la crisis que estamos viviendo», comentó Portilla.
Crisis hídrica y desesperación de los agricultores
La situación de los agricultores del Valle de San Lorenzo se ha tornado cada vez más desesperante. La falta de agua ha provocado que los cultivos se pierdan rápidamente, afectando no solo el bienestar emocional y físico de los productores, sino también su sustento económico. En muchos casos, los agricultores ya han invertido miles de soles en sus sembríos y ahora se enfrentan a la posibilidad de perderlo todo.
Según datos de la Asociación de Productores de Arroz, el 30% de las siembras en la región ya han sufrido daños irreversibles debido a la sequía. La falta de acceso al agua ha generado una crisis que afecta no solo a los pequeños productores, sino también a las familias que dependen del agro para sobrevivir.
Exigen una reunión urgente para resolver la crisis del agua
Ante la tragedia, los agricultores del Valle de San Lorenzo han decidido alzar la voz y exigir una solución inmediata. A través de sus representantes, han solicitado al Proyecto Especial Chira – Piura (PECHP) y al grupo PADH (Programa de Apoyo al Desarrollo Hídrico) la autorización urgente de un turno de riego de cinco días. Este riego, explican, podría salvar parte de sus cultivos y evitar una pérdida aún mayor.
«Si no nos dan estos cinco días de agua, perderemos todo lo que tenemos. Nuestras familias están al borde del colapso económico», afirmó Portilla, quien destacó que la solicitud es urgente y que se ha realizado una evaluación técnica que respalda la viabilidad de liberar el agua sin afectar el abastecimiento para consumo humano.
Los agricultores del Valle de San Lorenzo insisten en que es crucial una acción inmediata para evitar que más productores sufran las consecuencias de la crisis. Si no se logra una solución en los próximos días, temen que la pérdida de cultivos sea irreversible y que la situación empeore, afectando aún más la seguridad alimentaria y económica de la región.
Una tragedia que visibiliza la crisis del agua en Piura
La muerte de Alcides López Bustamante es solo una muestra del sufrimiento que enfrentan miles de agricultores en Piura debido a la escasez de agua. La crisis hídrica, que ha empeorado en los últimos meses, no solo ha afectado a los productores de San Lorenzo, sino también a otras áreas agrícolas de la región.
La solicitud de los agricultores es clara: necesitan agua para regar sus cultivos y evitar una catástrofe aún mayor. La situación se ha convertido en una prioridad para las autoridades locales, quienes se han comprometido a evaluar posibles soluciones y garantizar que los productores reciban el apoyo necesario para enfrentar esta difícil situación.
