Uno de los 38 internos que fugaron del Centro Juvenil Miguel Grau en Piura, conocido como «Maranguita», decidió entregarse voluntariamente. Se trata del menor C. J. S., natural de Castilla. Él llegó al centro de rehabilitación en compañía de su abogado César Palomino y su padre.

Según su defensa, el menor y los otros 37 internos fugaron del «Maranguita» en diciembre del año pasado tras supuestos maltratos físicos que recibieron por mucho tiempo. Además, mencionó que el jovencito huyó porque temía por su vida.

«De forma voluntaria, mi patrocinado se está entregando para cumplir su sanción que corresponde. Él se encuentra en perfecto estado, bien de salud y queremos que se garantice la vida de las personas y que no sean maltratados como supuestamente se ha estado haciendo», indicó el abogado.

El joven señaló que decidió entregarse por miedo a que atenten contra su vida y por ello ha estado escondido, pero decidió llegó voluntariamente. «Yo me fui por el temor a mi persona, a que me pase algo. Me dio miedo y no me quedó otra que salirme también», señaló haciendo referencia al día de la fuga masiva del «Maranguita».

Por su parte, el abogado reiteró que el menor se entrega en buenas condiciones de salud y que su entrega es voluntaria para que siga el debido proceso. «Si él ha cometido un error en su momento, hoy lo está resarciendo al entregarse de manera voluntaria», señaló.

Antes de ingresar al centro de rehabilitación acompañado de su abogado, el menor recibió el abrazo de su padre.

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