Por cuarto día consecutivo, el personal del Instituto Nacional Penitenciario (INPE) ha mantenido bloqueado el acceso al Penal Piura, impidiendo la entrada del nuevo personal destinado a administración, tratamiento y seguridad. Los empleados han anunciado que sólo levantarán la huelga si el jefe del INPE, Javier Llaque Moya, presenta su renuncia.
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El secretario del Sindicato Nacional de Trabajadores Penitenciarios (SINTPE) Piura, José de la Cruz Sandoval, informó que más de 150 empleados han detenido sus funciones, limitándose a ofrecer únicamente los servicios esenciales de alimentación y atención médica para los internos.
“El presidente del INPE, Javier Llaque Moya, se muestra arrogante y desconsiderado con nuestros derechos laborales. No se ha reunido con los sindicatos y ahora, en su desesperación, clama por nuestra presencia en las cárceles. Exigimos su dimisión, ya que consideramos que no está capacitado para el cargo”, afirmó Sandoval.
El sindicato ha presentado una serie de demandas, destacando principalmente la necesidad de un aumento salarial.
En ese sentido, los trabajadores piden la asignación de presupuesto para aplicar la Ley 29709 al personal CAS en 2025, un aumento de la remuneración integral mensual (RIM) para el personal regido por la citada ley, el cumplimiento del acuerdo extraprocesal relacionado con el curso del CENECP para el personal de tratamiento y salud. Además, manifestaron que desde el año 2013 no perciben un incremento en su salario.
Además, la asignación de una bonificación del 15 % del RIM por trabajo multifuncional y en condiciones adversas para el personal bajo la Ley 276 y el pago de vacaciones truncas al personal de la Ley 29709 según su récord vacacional.
