Un quiosco en la playa de Barra da Tijuca, en la zona oeste de Río de Janeiro, Brasil, se tiñó de sangre la madrugada del jueves cuando tres hombres dispararon a sangre fría contra 4 médicos, tres de ellos murieron. De acuerdo con el avance de las investigaciones, el ataque a los galenos se trataría de un error por parte de los sicarios.
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Tragedia en Brasil
El cruel ataque que sufrieron los médicos quedó registrado en una de las cámaras de videovigilancia del local. En el clip, que circula en las redes sociales, se puede observar cuando un coche se detiene y de este descienden tres varones vestidos de negro y comienzan a disparar sin piedad contra los cuatro galenos que se encontraban en un quiosco frente al complejo hotelero.
Según informó la prensa local, los delincuentes dispararon al menos 20 veces. Uno de los médicos asesinados, Diego Ralf Bomfim, de 35 años, era hermano de la diputada Samia Bomfim, del Partido Socialismo y Libertad (PSOL).
Se supo, además, que las víctimas era de Sao Paulo y viajaron a la ciudad carioca para asistir al Congreso Internacional de Cirugía Mínimamente Invasiva de Pie y Tobillo. Los doctores estaban hospedados en el Hotel Windsor, donde se celebraba el congreso.
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Ataque a los médicos habría sido un error
De acuerdo con el adelanto de las investigaciones de la Policía Civil de Río de Janeiro, el asesinato de los tres médicos sería un error por parte de los sicarios, pues, al parecer, estos habrían confundido a uno de ellos con un miliciano de la región de Jacarepaguá.
La confusión se habría producido porque el facultativo Perseu Ribeiro Almeida, una de las víctimas mortales del ataque, guarda un enorme parecido con Taillon de Alcântara, el presunto objetivo del grupo de hombres armados que disparó contra los galenos en un quiosco en Barra de Tijuca.
El motivo del ataque sería que los agresores, que se cree que son narcotraficantes, querían vengar la muerte de Paulo Aragão Furtado, un compañero suyo que habría sido asesinado el pasado 16 de septiembre por el hijo de un miliciano, según reportó Globo.
Se informó que un grupo aliado facilitó la información de que Alcântara se encontraba en el quiosco donde fueron tiroteados los médicos, algo que no era cierto. Sin embargo, se da la circunstancia de que miliciano buscado vivía cerca del quiosco donde ocurrió el crimen, según indicó el medio citado.