La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, negó rotundamente que el envío de una delegación mexicana al Foro de Cooperación Económica Asia-Pacífico (APEC) en Lima implique un acercamiento diplomático con Perú.
Esta postura reafirma la línea de distanciamiento que inició su predecesor, Andrés Manuel López Obrador, al calificar a la presidenta peruana, Dina Boluarte, como «usurpadora» tras la destitución de Pedro Castillo en 2022.
Participación de méxico en APEC
Sheinbaum explicó que la presencia del subsecretario de Comercio Internacional, Luis Rosendo Gutiérrez , en el evento obedece únicamente al compromiso de México como miembro del foro APEC. Recalcó que esto no debe interpretarse como un intento de reconciliación entre ambos países, cuyas relaciones diplomáticas se mantienen tensas desde la expulsión del embajador mexicano en Lima.
Las relaciones entre Perú y México se deterioraron notablemente tras los comentarios de López Obrador, quien cuestionó la legitimidad del gobierno de Dina Boluarte. Desde entonces, no ha habido indicios de una mejora en las relaciones bilaterales. Incluso en la reciente toma de posesión de Sheinbaum, el pasado 1 de octubre, Perú no fue invitado, lo que refleja la continuidad de este distanciamiento.
Delegación mexicana en APEC
Aunque el objetivo principal de la delegación mexicana en APEC 2024 es fortalecer la participación de México en el foro, su papel también resulta crucial en otros aspectos. Luis Rosendo Gutiérrez lidera los preparativos para la revisión del Tratado México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC) en 2026, un proceso que podría ser clave para las relaciones comerciales en América del Norte.
Sin embargo, esta revisión podría enfrentar desafíos adicionales debido al regreso de Donald Trump a la presidencia de Estados Unidos, quien ha manifestado su intención de imponer aranceles a México, lo que agregaría tensiones en la región.
