Insólito. Gustavo Monjes, un panadero de Córdoba (Argentina), perdió su empleo al enviar por error un audio de WhatsApp a su jefe, en donde se burlaba sobre el peculiar nombre que le asignó en su libreta de contactos.
Lo descubren
Todo surgió por una falla en el smartphone de Gustavo, quien le envió un audio a su empleador para solicitar un cambio en su horario, y así otro trabajador pueda iniciar las labores que se le asignaron.
El sujeto creyó que el mensaje había sido enviado y siguió con su rutina. Se reunió con unos compañeros y no dudó en contarles sin mesura alguna que tenía guardado a su jefe como ‘HDP’.
‘’Miren cómo lo tengo agendado a este HDP’’, dijo Gustavo a sus amigos, según informa Cadena 3. La risa se le esfumó cuando quiso contestar una llamada y vio en la pantalla de su móvil que la conversación con sus amigos siguió grabándose.
En esos segundos de desesperación intentó borrar el mensaje, pero ya todo estaba consumado. Su jefe había recibido el audio.
Gustavo, de 45 años, fue citado por la dirección de su trabajo, y contó a El doce que su jefe le pidió su celular. No quiso dárselo, a lo que fue incriminado por el empresario, quien reprodujo el audio desde su móvil y procedió a despedirlo.
«Las cosas no venían bien entre nosotros y por eso lo había guardado así. Lo hice porque estaba enojado con él porque no me facilitaba un dinero que yo quería y venía tensa la cosa porque habíamos discutido y estaba enojado», expresó a la radio local Cadena 3.
Gustavo Monjes comentó que en el año y medio que tenía en la empresa, no tuvo ninguna falta y supo desempeñarse en diversas labores. Además, tomó medidas legales para recuperar su puesto, y alega que no cometió ningún delito, por lo que espera una solución, ya que es padre soltero y cuida de tres niños.
Fuente La República