El grupo islamista palestino Hamás liberó este sábado a tres rehenes, en el marco del sexto intercambio con Israel, dentro de la tregua que se mantiene en la Franja de Gaza, la cual estuvo a punto de romperse esta semana. Los rehenes liberados en Jan Yunis, al sur de Gaza, son Yair Horn, ciudadano israelo-argentino de 46 años; Sasha Trupanov, ruso-israelí de 29 años; y Sagui Dekel-Chen, estadounidense-israelí de 36 años. A cambio, Israel liberará ese mismo día a 369 prisioneros palestinos, coincidiendo con la llegada del secretario de Estado de EE.UU., Marco Rubio, a Israel durante la noche.
El alto el fuego en Gaza estuvo a punto de colapsar debido a las acusaciones de Hamás contra Israel por presuntamente no cumplir con ciertos compromisos establecidos en la tregua, como la entrega de tiendas de campaña y asistencia humanitaria.
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Los milicianos de Hamás, encapuchados y armados, subieron a los rehenes a una plataforma, como en ocasiones anteriores. Los cautivos fueron obligados a dirigirse brevemente al público en hebreo antes de ser entregados al Comité Internacional de la Cruz Roja. Minutos después, el Ejército israelí confirmó que había recibido a los tres, quienes habían permanecido 498 días en cautiverio.
Horn, Trupanov y Dekel-Chen fueron secuestrados en el kibutz Nir Oz durante el ataque de Hamás el 7 de octubre de 2023, que desencadenó el conflicto en la región. Ese ataque dejó 1.211 muertos según cifras israelíes.
Hamás tomó como rehenes a 251 personas, de las cuales 70 siguen cautivas en Gaza, y se estima que 35 habrían muerto, según el Ejército israelí. En respuesta, Israel lanzó una ofensiva militar devastadora sobre Gaza, que ha provocado al menos 48.222 muertos, según el Ministerio de Salud de Hamás.
Tras intensas negociaciones con la mediación de Qatar, Egipto y Estados Unidos, se logró un acuerdo de tregua desde el 19 de enero, que puso fin a más de 15 meses de combates en Gaza. Sin embargo, esta semana la tregua estuvo en peligro debido a acusaciones de incumplimiento por ambas partes. Hamás amenazó con retrasar la liberación de rehenes, mientras que Israel advirtió sobre la posibilidad de reanudar el conflicto. Finalmente, la intervención de Qatar y Egipto permitió reiniciar el proceso de intercambio de prisioneros. Aunque el proceso de liberación ha avanzado, la continuidad del acuerdo sigue siendo incierta, ya que no se han iniciado las negociaciones para una segunda fase.
La oficina del primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, expresó que están trabajando estrechamente con Estados Unidos para lograr la liberación de todos los rehenes, tanto los vivos como los fallecidos, y que están preparados para cualquier escenario.
En Israel, las preocupaciones por el estado físico y psicológico de los rehenes aumentaron esta semana tras las declaraciones de Keith Siegel, un israelí-estadounidense de 65 años liberado a principios de mes. En un video, describió su cautiverio como una experiencia de «miedo constante» y condiciones «inimaginables», relatando haber sufrido hambre y torturas físicas y emocionales.
En el intercambio del 8 de febrero, Hamás obligó a tres rehenes visiblemente debilitados a saludar a la multitud en Gaza, lo que generó indignación en Israel. Además, el Club de Prisioneros Palestinos, que defiende los derechos de los detenidos, informó que siete de los excarcelados fueron hospitalizados en Cisjordania debido a las «condiciones brutales» de su encarcelamiento en Israel.
