El 10 de marzo de 2025, un petrolero estadounidense y un buque de carga portugués colisionaron frente a la costa de Hull, en East Yorkshire, desencadenando incendios a bordo de ambas embarcaciones. El accidente ha generado gran preocupación no solo por los daños materiales, sino también por los posibles efectos medioambientales que pueda causar el incendio, que ya ha sido visible en imágenes difundidas por la BBC, con espeso humo negro rodeando las naves.

Respuesta de emergencia ante el incidente

La Guardia Costera del Reino Unido confirmó que está coordinando la respuesta ante el desastre. «Estamos trabajando en estrecha colaboración con equipos de rescate para asegurar la seguridad de los tripulantes y evitar un desastre medioambiental», indicó un portavoz. La Real Institución de Botes Salvavidas (RNLI) reportó que 32 miembros de las tripulaciones de ambos barcos fueron evacuados, aunque aún no se tiene información sobre la totalidad de los ocupantes.

Impacto en el tráfico marítimo y estado de las embarcaciones

El accidente involucró al petrolero Stena Immaculate, de bandera estadounidense, y al portacontenedores Solong, de bandera portuguesa. Según los informes, el Stena Immaculate provenía del puerto griego de Agioi Theodoroi, mientras que el Solong viajaba desde el puerto escocés de Grangemouth con destino a Róterdam, en los Países Bajos. A pesar de la evacuación de las tripulaciones, persisten temores sobre la magnitud de los daños y los riesgos ambientales derivados del siniestro.