Rafah, una ciudad al sur de la Franja de Gaza, se enfrenta a una crisis humanitaria sin precedentes mientras más de 80 mil personas huyen en busca de refugio debido al aumento de las operaciones militares de Israel.
Según los informes, desde el 6 de mayo, las fuerzas israelíes han intensificado sus operaciones en Rafah, obligando a decenas de miles de personas a abandonar sus hogares en busca de seguridad.
«El precio que están pagando estas familias es insoportable», indicó la agencia de la ONU a través de su cuenta de Twitter, señalando la grave situación humanitaria en la región.
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Exodo del refugio temporal de la guerra en la Franja de Gaza
La magnitud del éxodo es aún más impactante considerando que Rafah, ubicada junto a la frontera con Egipto, alberga a aproximadamente 1.4 millones de personas. Muchos de estos habitantes llegaron a la ciudad en los últimos siete meses huyendo de la guerra que devastó otras partes de la Franja de Gaza, convirtiendo a Rafah en un refugio temporal para miles de familias.
El llamado del ejército israelí a los residentes de Rafah para evacuar la parte occidental de la ciudad precedió a una escalada de bombardeos y al inicio de una operación terrestre. Según un portavoz militar, se estima que alrededor de 100 mil personas deben evacuar hacia «la zona humanitaria ampliada de Al Mawasi», a unos diez kilómetros de Rafah.
Isarel procederá con operaciones militares
Las autoridades israelíes justifican su acción argumentando que los últimos bastiones de Hamás se encuentran atrincherados en Rafah. Desde hace meses, Israel ha expresado su determinación de lanzar un ataque terrestre para eliminar al movimiento islamista palestino, que ha estado en el poder en Gaza desde 2007.
Preocupación
La comunidad internacional ha expresado su profunda preocupación por la situación en Rafah y ha instado a un alto el fuego inmediato para evitar una catástrofe humanitaria. En medio de la incertidumbre y el temor, la necesidad de una respuesta internacional coordinada se vuelve cada vez más urgente para garantizar la protección y el bienestar de los civiles afectados por el conflicto en la Franja de Gaza.