El lunes 23 de diciembre, la Policía Nacional del Perú (PNP), en conjunto con la Municipalidad de San Martín de Porres, desarticuló una red de corrupción. Un fiscalizador municipal fue arrestado por exigir sobornos a empresarios a cambio de evitar el cierre de sus establecimientos, subrayando la relevancia de la denuncia ciudadana en la lucha contra la corrupción.
En una rueda de prensa, el alcalde del distrito, Hernán Sifuentes, elogió la rápida intervención de la Dirección Contra la Corrupción de Lima Norte (DIRCOCOR-PNP), que permitió la captura de Jesús García Pardo, un fiscalizador de 31 años que laboraba en el distrito desde 2021. La denuncia formal presentada por un administrador de un centro de eventos fue crucial para ejecutar la operación, que culminó con la detención del acusado en flagrancia. El fiscalizador cobraba una cuota diaria a los empresarios para evitar clausurar sus negocios.
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La intervención ocurrió el lunes 23 de diciembre, cuando el fiscalizador fue detenido mientras recibía 100 soles de un administrador de un local. Según el denunciante, este pago se solicitaba a diario, generando un clima de temor y desconfianza entre los empresarios del área. Junto al fiscalizador, también fue arrestado quien aparentemente se encargaba de recibir el dinero a través de la billetera digital Yape.
La operación fue posible gracias a la coordinación entre la Policía, el municipio y el Ministerio Público. Además, se descubrió que el fiscalizador no solo operaba en un negocio, sino que extorsionaba a varios establecimientos en el distrito, amenazando con su cierre si no cumplían con sus demandas económicas, según informó el general de la PNP, Luis Lira. El alcalde Sifuentes destacó que la corrupción no solo afecta a los gobiernos locales, sino que también se extiende a otras entidades del Estado. “Desde el municipio, invitamos a todos los vecinos a denunciar si conocen de estos casos, sin temor alguno”, expresó.
El fiscalizador arrestado enfrenta serias acusaciones por cohecho pasivo, un delito que podría acarrear hasta ocho años de prisión. Además, su cómplice, que recibía el dinero, también podría ser procesado. Después de la intervención, García Pardo fue destituido de su puesto en la Municipalidad de San Martín de Porres, lo que refleja la postura firme del alcalde Sifuentes en contra de la corrupción.