Iván Hernández Alarcón, un joven de 31 años, está luchando por su vida después de sufrir quemaduras graves de primer, segundo y tercer grado en casi todo su cuerpo. El ataque ocurrió el 28 de marzo en el distrito de Jesús María, cuando su amigo de la infancia, identificado como José Manuel Egoavil Portillo, lo roció con alcohol y le prendió fuego.
Según el relato del padre de Iván, Humberto Hernández, el agresor reaccionó violentamente cuando Iván expresó su deseo de retirarse de la reunión social y dejar de beber. El atacante lo encerró en el baño para impedirle salir y, en un primer intento, prendió fuego a las zapatillas de Iván. Tras este primer ataque, Iván intentó escapar, pero su amigo lo roció nuevamente con alcohol y volvió a prenderle fuego. A pesar de las terribles quemaduras, Iván logró abrir la puerta y salir, aunque el agresor le insistió en seguir bebiendo.
Iván recibe tratamiento en el Hospital Arzobispo Loayza
Iván fue rápidamente trasladado al Hospital Arzobispo Loayza, donde actualmente se encuentra internado en estado grave. Ha sido sometido a una operación y está recibiendo tratamiento especializado para las severas quemaduras. Su familia clama por justicia, exigiendo que el agresor enfrente las consecuencias de su acción.
El presunto agresor, José Manuel Egoavil Portillo, ha sido denunciado por intento de homicidio y la policía continúa con las investigaciones para esclarecer los hechos. Mientras tanto, la familia de Iván pide que el caso no quede impune y se haga justicia por el brutal ataque.