Agustín Lozano, presidente de la Federación Peruana de Fútbol (FPF), fue detenido ayer por orden judicial en el marco de una investigación por presunta corrupción y pertenencia a una organización criminal conocida como «Los Galácticos». La operación, que incluyó una serie de allanamientos en diversas ciudades del país, también involucró a otros altos funcionarios del fútbol peruano y personajes vinculados al deporte, generando una gran conmoción en el ámbito deportivo nacional.
La detención de Lozano se produjo luego de un allanamiento en su vivienda en San Borja, Lima, donde las autoridades ejecutaron un operativo de descerraje para cumplir con la orden judicial. Según fuentes oficiales, el presidente de la FPF permanecerá detenido de manera preliminar por 15 días mientras se desarrollan las investigaciones. Este caso está relacionado con una red de corrupción, fraude en la administración de recursos y lavado de activos dentro del ámbito del fútbol peruano.
Allanan viviendas
El fiscal encargado del caso sostiene que Lozano lideraría un grupo criminal que operaba en el fútbol, aprovechándose de su cargo para cometer actos ilícitos. A lo largo de la jornada, se ejecutaron al menos 12 allanamientos en Lima y otras ciudades, incluyendo la sede de la Villa Deportiva Nacional (Videna), donde también se realizaron incautaciones de documentos y material relacionado con el caso.
Además de Lozano, el operativo alcanzó a varios personajes clave del fútbol peruano. Entre ellos destacan Joel Raffo, presidente del club Sporting Cristal; Gisella Mandriotti, presidenta del club Academia Cantolao; y el exfutbolista Juan Carlos La Rosa. También fueron detenidos la secretaria de la FPF, Sabrina Martin Zamalloa; el exsecretario de la FPF, Jean Marcel; y Humberto Miñán, presidente de la Liga de Tumbes. Las autoridades han indicado que todos estos individuos están siendo investigados por su presunta vinculación con actividades ilícitas dentro de la organización criminal «Los Galácticos».
La detención de Agustín Lozano y la involucración de otros altos directivos del fútbol peruano han sacudido el panorama deportivo en el país. Se espera que en los próximos días se proporcionen más detalles sobre las investigaciones, que podrían tener implicancias significativas para el futuro de la FPF y el fútbol peruano en general.
Este episodio se suma a una serie de escándalos que han golpeado al deporte en Perú, y coloca nuevamente en la mira la gestión administrativa de las federaciones y clubes de fútbol del país.