Como reza el dicho “nadie es profeta en su tierra”. Es el caso de Blanca Ugarte-Quiroz Curo, quien tras 30 años de vivir recorriendo casi todo Venezuela compartiendo sus conocimientos de su gran pasión, la cocina; ahora se encuentra en Piura, con muchos proyectos en mente que busca esta vez tener la oportunidad de cristalizarlos y seguir promocionando la cocina peruana como digna Embajadora gastronómica del Perú.

¿Cómo han sido esos años fuera de tu país?

Todos esos años han sido de viajes, sobre todo haciendo entrenamientos en cuanto a proceso de alimentos, de cómo la gente puede elaborar en su propia casa productos de consumo masivo.
¿ Siempre has sentido esa pasión por la cocina?

Desde niña siempre me encantó la cuestión de los alimentos, estudié ingeniería industrial en la UNP, me gradué y mi pasión es transformar un insumo en otro; la creactividad se da en el instante y lo tienes que aprovechar.

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¿Cómo decides ir a vivir a Venezuela?

Me fui a Venezuela hace casi 30 años, me encanta el país, me desarrollé mucho allá, siempre tuve el patrocinio de marcas de alimentos de trayectoria. He recorrido 22 de los 24 Estados venezolanos, incluso llegué hasta Santa Elena de Huairén, frontera con Brasil, allí me quedé 4 meses realizando mis actividades al aire libre.

¿Has promovido mucho la cocina peruana?

En el 2015, en la universidad de Carabobo se realizó la Feria Internacional del Libro, donde presenté una ponencia que repletó el sitio y se llamó ‘Piura, la cuna del cebiche peruano y su gastronomía’. Allí, varios de mis alumnos presentaron la chicha de jora, la algarrobina, el seco de chavelo; la gente quedó maravillada.

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¿Qué otras actividades has realizado?

Otro fue el Primer Festival Internacional del Maíz, en Carabobo donde participó Perú con sus platos tradicionales, junto a México, Colombia y Venezuela. De ahí la designación de Embajadora Gastronómica del Perú.

TRANSFORMAR

¿ Le das especial relevancia a los insumos?

Mi pasión es transformar un insumo en otro, mi curso de helados cremosos y siropes, lo adapté en Venezuela y ese fue mi curso estrella, con ese comencé. Mis cursos están diseñados para que las personas tengan su herramienta de trabajo.

¿Te gustan las fusiones?

Cuando uno va a un sitio aporta y absorbe y después hace como una mixtura y sale algo diferente. He tenido muy buenos profesores, también he aprendido de cocina china, italiana, mexicana y venezolana.

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¿Qué proyectos en Perú?

Tengo proyectos con algunas universidades, en Iquitos me he reunido con ingenieros de la cátedra de alimentos y les ha interesado mi trabajo.

¿Qué falta al proceso de alimentos?

Si bien alguien que estudia ingeniería de alimentos sabe todas las normas, pero no se pone a cocinar, a fabricar un producto; eso es lo que se necesitamos.

PROYECTO DE INTERCAMBIO CULTURAL

¿Eres también una viajera empedernida?

En Venezuela hacía rutas, por ejemplo, la ruta del helado, he subido al Monte Roraima (Venezuela), dicté un curso gratuito por todos esos brazos del Orinoco. Ahora que vine a Perú tomé un viaje de 20 días. Los trekking me fascinan.

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¿Cuéntanos del proyecto cultural que alistas?

He sido designada comisionada internacional para asuntos culturales de la UNP. El proyecto se llama ‘Proyecto Transpacífico, que ya fue aprobado desde el año pasado para un intercambio intercultural. Es un proyecto de intercambio entre las comunidades de las primeras naciones australianas con las comunidades piuranas en el ámbito de la artesanía. Orfebres australianos están muy interesados en venir a aprender las técnicas nuestras.

¿Es un hecho este evento?

Una artista muy reconocida, Dona Braun es la que está planificando todo esto, y espero que todo llegue a feliz término. Esperamos que la empresa privada y el gobierno apoyen.