Los vecinos del asentamiento Buenos Aires en Tambogrande, vienen soportando por más de una semana el colapso de sus buzones de desagües que emanan olores nauseabundos y proliferación de zancudos, mosquitos perjudicando a más de mil familias.

El presidente de la comisión de salud de la comuna, Jorge Celi, fiscalizó las calles afectadas por el desborde de los desagües, ya que llevan varios días conviviendo con estas aguas servidas que pasan por sus casas, poniendo en riesgo la salud de todos los vecinos.

Por su parte, el morador del jirón Porvenir, Juan Rufino, manifestó que los olores son insoportables y necesitan con urgencia que los encargados del alcantarillado vengan a limpiar estos buzones que se han convertido en un peligro latente por las enfermedades que puede traer consigo.

Los pobladores se sienten mortificados porque estos buzones siempre colapsan y hasta ahora no existe ninguna solución.