El consumo de tabaco suele ser justificado por supuestos beneficios derivados de su uso. En esa línea el doctor Enrique Ferrer, explica la realidad sobre los mitos y detalla cuáles son los reales efectos en nuestra salud:
1. Solamente fumando te relaja
Debido a la dependencia que genera, el tabaco produce una falsa sensación de tranquilidad, la cual concluye inmediatamente después de terminar de fumar. En realidad, para relajarnos, no es necesario recurrir al tabaco, sino a alternativas para manejar o disminuir el estrés.
2. Ser fumador social no hace daño
Entiéndase fumador social por aquella persona que sólo fuma en eventos sociales. Sin embargo, consumir un solo cigarro periódicamente basta para desarrollar enfermedades respiratorias, las cuales pueden llegar a ser tan peligrosas como el cáncer de pulmón.
3. Te quita el frío
Durante la época de invierno, muchas personas fuman para supuestamente reducir la sensación de frío. Esta es una percepción falsa, ya que fumar produce una sensación de aumento de energía o vigor, sin embargo, no tiene relación con ningún aumento de la temperatura corporal.
4. Controla el mal humor
Es importante conocer que el fumador mantiene constantes niveles de nicotina en la sangre. Cuanto estos niveles desciende se genera en él la necesidad de fumar, y si no lo hace, se pueden desarrollar estados de irritabilidad.
5. Dejar de fumar es complicado
El síndrome de abstinencia es temporal y las ventajas de dejar de fumar son muchas. Apenas 20 minutos después de dejar el cigarro la frecuencia cardíaca y la presión arterial se normaliza, a los tres días el cuerpo elimina todas las toxinas, a los tres meses, la tos desaparece. Todo esto es perfectamente perceptible por el ex fumador.
Además del cáncer al pulmón, el tabaco también es responsable del cáncer a la boca, lengua, esófago, faringe, y enfermedades respiratorias crónicas, enfermedades cardiovasculares, entre otras.