Los lentes de sol de madera con incrustaciones de filigrana diseñados por el piurano, Diego León Vivar, en conjunto con la familia Fernández, reconocidos joyeros de Catacaos se expondrán en Rusia.

Su afición por los lentes viene desde niño y cuando acabó sus estudios de diseño industrial comenzó a diseñar lentes de todo tipo hasta que un buen día dijo: “voy hacer unos lentes de madera”.

Lentes de madera en filigrana.

Así comienza la historia del joven diseñador piurano de 31 años, Diego León Vivar cuya marca de lentes de sol Filtro estará exhibiéndose en la ‘Casa Perú’ en Rusia, junto a otras piezas de artesanía de reconocidos artesanos de todo el país.

Según cuenta Diego, desarrollar este tipo de lentes le llevó como dos años hasta que logró lo que quería: diseñar lentes de madera con incrustaciones de filigrana de plata. “Marcas de lentes de madera hay muchas, no quería que mi marca Filtro sea una más del montón, así que busqué cómo diferenciar la marca”.

Agrega que por su trabajo como diseñador en el 2015 empezó a trabajar con artesanos de Piura, Huamanga y Ayacucho “y ahí me di cuenta que dentro de la artesanía podía hacer la diferencia que estaba buscando”.

Así es como conoce a Jorge Fernández y le propone trabajar la idea que tenía de hacer lentes con incrustaciones de plata utilizando la técnica de la filigrana.

Diego indica que desde el principio surgió una relación de confianza con la familia Fernández, lo que le ha permitido llevar ya casi año y medio diseñando en trabajo colaborativo con ellos esta marca de lentes que se venden a través de la página www.filtro.pe.

Premio y ‘Casa Perú’

“Ha sido como dos cosas medio juntas, primero el concurso nacional de artesanía que organizó Mincetur donde ganamos en la categoría negocio innovador y después aparece la convocatoria de Casa Perú, donde se ha seleccionado la colección Filtro con un modelo muy conceptual ‘Simache’», nos cuenta Diego sobre la participación de su marca de lentes en la Casa Perú, en Rusia.

Una nueva puerta

“De verdad es como un sueño hecho realidad, cuando empecé lo veía como un hobby y ahora mi marca estará en Rusia; no solo es un producto de nuestra cultura, de nuestro patrimonio, sino que es algo nuevo que entra a un mercado actual, globalizado que abre una nueva puerta a la filigrana”, remarca el joven diseñador piurano, para quien esa conexión entre diseñadores y artesanos es lo que nos diferencia del resto del mundo.