Un grupo de taxistas protestó ayer con sus bulliciosas unidades por las calles céntricas de la ciudad para exigir a la comuna piurana, permisos para prestar el servicio público y que cesen con el internamiento de sus unidades.
La marcha la iniciaron desde el Parque Santa Ana y concluyeron con un plantón de protesta en las oficinas de Transportes, donde a viva voz exigieron permisos y se quejaron por las papeletas. Asimismo, anunciaron que el 12 de junio acatarán un paro de protesta.
Durante su recorrido, específicamente cerca del Parque Infantil, se enfrentaron verbalmente a un grupo de inspectores, pero los reclamos no llegaron a mayores.