YouTube se enfrenta a una investigación seria por permitir la publicación de tutoriales que enseñan cómo fabricar armas, accesibles a menores de edad. Esta preocupación ha escalado hasta llegar a las autoridades, quienes están examinando el impacto potencial de estos contenidos en la seguridad pública y en la influencia que pueden tener sobre los jóvenes.
Un fiscal ha hecho un llamado a YouTube para que se una a la lucha contra la proliferación de armas caseras, solicitando a la plataforma que tome medidas más estrictas para controlar el tipo de contenido que se puede compartir y quién puede acceder a él. La preocupación es que estos tutoriales no solo son técnicamente detallados, sino que están al alcance de un público joven e impresionable, aumentando el riesgo de incidentes violentos.
Los críticos de la plataforma argumentan que YouTube ha devenido en una suerte de «escuela para la delincuencia», facilitando a los usuarios los conocimientos necesarios para la creación de armamento que podría ser usado en actividades ilegales. Este debate resalta un problema más amplio sobre cómo las plataformas de medios sociales gestionan el contenido que puede ser potencialmente dañino o peligroso, mientras tratan de mantener la libertad de expresión.
La investigación actual pone a prueba las políticas de moderación de contenido de YouTube y podría resultar en cambios significativos en cómo la plataforma regula los videos relacionados con armas. A medida que el caso se desarrolla, YouTube podría tener que implementar nuevas estrategias para asegurar que su plataforma no se use para el intercambio de información que pueda comprometer la seguridad pública.
