«PEZ FÚTBOL DEL PACÍFICO», así lo llaman. Parece sacado de una película de terror, pero no lo es. En el mundo solo hay 200 especies.
Un inusual pez fue encontrado varado en playas de California, su hallazgo fue sorprendente pues su hábitat es a miles de pies de profundidad en el océano.
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Con dientes afilados, cuerpo redondo cual pelota de fútbol, la monstruosa creatura de color negro fue encontrado en el Área Marina Protegida del Parque Estatal Crystal Cove en Laguna Beach.
PEZ FÚTBOL DEL PACÍFICO
A través de redes sociales fue que el Parque Estatal compartió las primeras postales de su encuentro y lo bautizaron como «lo identificó como el pez del fútbol del Pacífico.»
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El Pacific Football Fish es una de las más de 200 especies de rape en todo el mundo, según los Parques Estatales de California, y normalmente se encuentra en las oscuras profundidades del océano.
Los dientes de la criatura son afilados y puntiagudos como fragmentos de vidrio y su «boca grande es capaz de succionar y tragar presas del tamaño de su propio cuerpo».
De acuerdo con especificaciones de los expertos, la criatura se trata de una hembra. «¡Solo las hembras poseen un tallo largo en la cabeza con puntas bioluminiscentes que se utilizan como señuelo para atraer a sus presas en la oscuridad de aguas de hasta 3000 pies!».
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Afirman que las hembras pueden crecer hasta 24 pulgadas de largo, mientras que los machos solamente una, ya que su único propósito del pez macho es ayudar a la hembra a reproducirse.
«Los machos se adhieren a la hembra con sus dientes y se convierten en ‘parásitos sexuales’, eventualmente fusionándose con la hembra hasta que no queda nada de su forma excepto sus testículos para la reproducción», sostienen los especialistas.
«Ver este pez extraño y fascinante es un testimonio de la diversidad de vida marina que acecha debajo de la superficie del agua …», se lee en la publicación del Parque Estatal Crystal Cove.
«… y a medida que los científicos continúan aprendiendo más sobre estas criaturas de aguas profundas, es importante reflexionar sobre cuánto queda por aprender de nuestro maravilloso océano».