Una revelación sorprendente ha emergido del Cinturón de Kuiper, la vasta región helada más allá de Neptuno, donde los planetas enanos Eris y Makemake han revelado signos de actividad geotermal. Este descubrimiento, basado en observaciones del telescopio espacial James Webb (JWST), plantea nuevas preguntas sobre la evolución interna de estos cuerpos helados y su potencial habitabilidad.
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¿Qué revelan las observaciones del telescopio espacial Webb?
El Dr. Christopher Glein del Southwest Research Institute (SwRI), experto en geoquímica planetaria, lidera el estudio que ha identificado evidencia de actividad hidrotermal o metamórfica en los núcleos rocosos de Eris y Makemake. Estos planetas enanos, comparables en tamaño a Plutón, se creía que eran objetos fríos y muertos en el Cinturón de Kuiper.
La Sorpresa del Telescopio Espacial James Webb (JWST)
El JWST ha proporcionado datos reveladores al analizar moléculas isotópicas en las superficies de estos mundos helados. Los isotopólogos, moléculas con átomos que tienen diferentes números de neutrones, han revelado una composición inesperada en el metano de Eris y Makemake.
¿Qué indica la relación D/H en el metano detectado?
La relación de deuterio (D) a hidrógeno (H) en el metano de estos planetas enanos ofrece una ventana única para comprender su evolución geológica. La moderada relación D/H observada contradice la presencia de metano primordial en una superficie antigua, sugiriendo en cambio orígenes geoquímicos del metano producido en el interior profundo.
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¿Cómo podría cocinarse el metano en los núcleos rocosos?
Los datos sugieren temperaturas elevadas en los núcleos rocosos de Eris y Makemake, indicando procesos térmicos que podrían producir metano. Este hallazgo desafía la creencia previa de que los objetos del Cinturón de Kuiper deberían tener superficies antiguas pobladas por materiales heredados de la nebulosa solar primordial.
¿Qué implicaciones tiene para la habitabilidad?
La posibilidad de océanos de agua dentro de estos planetas enanos plantea la intrigante posibilidad de habitabilidad. Si Eris y Makemake albergaran actividad geotermal en sus núcleos rocosos, podrían haber experimentado procesos criovolcánicos, entregando metano a sus superficies en tiempos geológicamente recientes.
La evolución de los mundos helados en el Cinturón de Kuiper
Durante las últimas dos décadas, la comprensión de los científicos sobre la evolución interna de los mundos helados ha cambiado significativamente. La presencia de océanos subterráneos en lunas como Encélado y Europa ha abierto nuevas perspectivas sobre la habitabilidad planetaria potencial.
