Luego que dos amigos fueron atacados a balazos en una vivienda del asentamiento Pampas de Castilla, dos pistoleros en moto atentaron, en dos oportunidades, contra una vivienda. En tanto, en Sullana, dos criminales ingresaron a un taller de planchado y pintura para abrir fuego contra padre e hijo ocasionándoles heridas de consideración.

Transcurría las dos de la madrugada de ayer. Cuando la madre V. E. H. I. (21), junto a sus menores hijos, descansaba en su inmueble, situado en la calle Talara del asentamiento Chiclayito, escuchó el ruido de una motocicleta. Seguidamente el estruendo de 10 disparos retumbó en el sector.

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Se conoció que los maleantes, en medio del olor a pólvora por los disparos, huyeron en la motocicleta por las calles del mencionado sector. Sin embargo, allí no acabó el problemas. Pasada las 6:30 de la mañana, los mismos individuos retornaron en la moto para disparar contra la casa.

Los menores (hijos de la agraviada) aterrados por el ruido de los disparos no sabían que hacer. Los vecinos, temiendo que suceda algo peor, solicitaron apoyo a la comisaría El Indio.

Hasta el lugar llegó un grupo de agentes, al mando del capitán de la Policía, Roy Paredes, para iniciar las investigaciones.

Detienen a pistoleros

Los efectivos policiales en la rápida búsqueda de los bandoleros inició un rápido operativo que culminó con la ubicación y detención de J. S. G. C. (21) y H. J. V. F. (23), los mismos que fueron plenamente reconocidos por los testigos como los autores de los dos ataques.

La detención de los dos sujetos ocurrió en la esquina de las calles César Vallejo con Los Pinos del asentamiento Chiclayito.

Piura: Balean a  pdre e hijo en Sullana

En otro feroz ataque ocurrido ayer, Efraín Huanca Merino (56) y su hijo Miguel Ángel Huanca Jiménez (27) fueron atacados a tiros en su taller de pintura y planchado “Sr. Huanca” ubicado a un costado de la carretera Sullana-Tambogrande, frente a un grifo.

Ante la llegada de una moto lineal con los dos criminales, padre e hijo corrieron por su vida siendo perseguidos por su verdugo para dispararle doce veces ocasionándoles heridas de consideración. Los bandoleros tras el ataque huyeron con dirección al sector de Los Olivos.

Vecinos de la zona al escuchar los disparos salieron de sus casas encontrando a las dos personas ensangrentadas por lo que fueron llevadas en un mototaxi hasta emergencia del Hospital de Sullana.

Miguel Angel fue ingresado al quirófano ya que una bala ingresó en la parte abdominal de su cuerpo y luego de un dos horas salió de la operación, su pronóstico es reservado.

En tanto, su padre, Efraín Huanca presentaba herida por proyectil de arma de fuego en la espalda con entrada y salida por lo que también quedó internado. Se conoció que su estado era estable.

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