La reciente declaración del presidente del Consejo de Ministros, Gustavo Adrianzén, ha generado controversia, ya que aseguró que, a pesar de la grave situación de criminalidad en el país, no percibe que la cifra de delitos se haya desbordado. Estas afirmaciones se realizaron en el marco del estado de emergencia decretado en 14 distritos de Lima y Callao.
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Estado de emergencia en Lima y Callao: ¿Cómo afecta la seguridad ciudadana?
El estado de emergencia fue implementado como una medida para controlar el aumento de la delincuencia, especialmente en zonas donde los niveles de violencia y extorsión han afectado la vida diaria de los ciudadanos. Desde que se inició esta medida hace más de 20 días, se han registrado 24 fallecidos vinculados a la criminalidad, una cifra que genera preocupación entre la población y las autoridades locales.
Gustavo Adrianzé: «No siento que las cifras hayan desbordado como en algunas ocasiones se ha mencionado»
Durante una conferencia de prensa, Gustavo Adrianzén fue cuestionado sobre los resultados del estado de emergencia. En respuesta, señaló que, aunque los números han aumentado, no cree que la situación haya llegado a niveles incontrolables.
«No siento que las cifras hayan desbordado como en algunas ocasiones se ha mencionado», comentó Adrianzén. A pesar de esta afirmación, reconoció que los resultados no son los mejores, pero afirmó que el gobierno seguirá trabajando para reducir la delincuencia en Perú.
Muertes durante el estado de emergencia: ¿Qué tan efectivo ha sido?
Una de las críticas más frecuentes hacia el estado de emergencia es la percepción de que, a pesar de las medidas tomadas, los crímenes violentos siguen ocurriendo a un ritmo alarmante. Los 24 fallecidos registrados durante este periodo reflejan que la inseguridad sigue siendo un problema grave en las zonas afectadas, lo que ha generado dudas sobre la efectividad de las acciones del gobierno.
Sin embargo, para Adrianzén, los resultados son alentadores en cierto sentido. El presidente del Consejo de Ministros enfatizó que, aunque hay áreas que necesitan mejoras, las acciones implementadas han evitado que la situación empeore significativamente.
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Críticas al manejo de la seguridad: ¿Es suficiente el estado de emergencia?
El anuncio de Gustavo Adrianzén no ha sido bien recibido por todos. Diversos sectores han criticado la falta de medidas más contundentes para enfrentar la delincuencia. Uno de los principales puntos de crítica es la permanencia de Juan José Santiváñez, ministro del Interior, en su puesto, a pesar de los cuestionamientos sobre su gestión durante este periodo de crisis.
Adrianzén respondió a estas críticas defendiendo la continuidad de Santiváñez. Según el premier, no se ha evaluado la renuncia del ministro y calificó de «mezquindad» las críticas hacia los resultados obtenidos.
«Hay una profunda mezquindad que niega que esto pueda considerarse también un éxito», afirmó Adrianzén, defendiendo que la situación no está fuera de control y que se han tomado decisiones acertadas para manejar la criminalidad.
¿Qué sigue para el estado de emergencia? Posible extensión a más distritos
Ante la pregunta de si el estado de emergencia podría ampliarse a otros distritos, Gustavo Adrianzén fue claro: «Estamos tratando de contener la delincuencia en estos distritos que nos parecen ahora mismo los más preocupantes». Sin embargo, no descartó la posibilidad de extender esta medida a otras zonas si fuera necesario.
«Si hubiese necesidad, por supuesto trabajaremos en la evaluación de este tema», agregó. Este comentario abre la puerta a futuras ampliaciones del estado de emergencia en otras regiones del país si la criminalidad continúa en aumento.
¿Qué más se puede hacer para mejorar la seguridad en el Perú?
La opinión pública demanda que el gobierno no solo continúe con medidas como el estado de emergencia, sino que también busque soluciones de fondo para enfrentar los problemas estructurales que generan la delincuencia. Entre las propuestas más discutidas están:
- Mejorar el sistema judicial para asegurar que los delincuentes reciban castigos adecuados.
- Fortalecer a la policía nacional, brindando más recursos y capacitaciones para enfrentar la violencia de manera efectiva.
- Desarrollar programas sociales que ayuden a reducir las causas subyacentes de la criminalidad, como la pobreza y la falta de oportunidades.